Somos todos estos amores rotos,
estas manos que nos desnudan de relojes y olvidan el tiempo,que nos cierran los párpados,y nos besan el sexo.
Somos estas añoranzas matutinas
estos encuentros tardíosque nos desprenden de cierres,
de botones y de teorías.
Aquí estás,
y cada poro grita tu nombre,
acaso vuelves,
y cada pierna habla de tu cintura.
Y al final somos estos besos,estos conjuros renovados,
estas antiguas maneras
que se encuentran las manos.