Tuesday, November 20, 2007

Desnudez



Y cuando mis huesos
ya deshechos en tus caderas
abneguen de mi carne
de mi conciencia lejana
de mi locura angustiada

y se dejen a tu ritmo
al vaivén de tus ganas
a lo simbiótico
de mis manos y tu espalda

será la fusión de las constantes;

desde tu piel,
hasta mi alma.

Sofía.

No-saber


Quizás es que sí,
que mis neuronas se cansaron
de mi necesidad inamovible de ordenar
de mi compulsividad hacia la tragedia griega

y decidieron dejar de manifestarse
volverse etéreas, eternas
colapsar en lapsos de tiempo
modulados por la distancia
asociados a la compulsividad
por las señales Beta
y atrofiados por el smog.

Ya partí hace tiempo
y mi cuerpo sólo espera;

Quizás la inconciencia deje de atrofiarnos la existencia.


Sofía.

Friday, August 10, 2007

Julio

A veces me recoges de a pedazos,

te muestro una que no fui,
te invito a regocijarte en formas inconstantes,
te mareo con vestigios de mi alma,
de un amor.


Otras veces me gustaría

volver a la virginidad mental
que me provocaban los 14 años
y encontrarte como solía hacerlo,
como una vez supe,
porque el pasado, el condicional y posesivo
me amordazaba las ideas,
los deseos, la corteza débil de mi piel,
los primeros besos,
la angustia del orgasmo.


Pero vuelvo
y me encuentro en tus ojos
que son los profundo de la tierra,
la savia de la corteza que me atraviesa
y me pierdo en frecuencias indescifrables
que a veces son horas
pero que me arrancan los improperios del alma,
o te buscan, simplemente,
en tus raíces;

Que no entiendo,
que me pierdo pero que me llevas a la locura y a la conmoción,
que violentas mis ideas
sólo porque están viejas y olvidadas;
que me gustaría escupirte con odio todo el amor.


...y entonces el paralelismo de las ideas; la ambigüedad.

Pero te quiero, entonces vuelvo.



Ilustración: Ansilta Santos
http://cargocollective/aansil

Un fin

Y esta sensación
que me arde desde el fondo,
estas ideas
que me obligan eróticamente a desnudarme
abandonar mis defensas, mis vestigios
y hacer que desee tanto
dejarme llevar por tus ojos
que me conmueven,
tus manos que me acarician
y provocan retorcerme,
arder mi sexo y el tuyo,
amar la desesperación de llegar.


Y derrepente las ideas
las que me amordazan
y me obligan a sentir,
invitandome al dolor.
Sugiriendome el placer.

Tan sensualmente... Con un fin.


Sofía - 24/06/07

Aguafuerte

Y en la rutinaria mirada
te desnudo irreverente,
inconmensurable.




Porque son tus ojos
los que me hablan y me gritan
se me encarnan en las horas
y yo trato,
trato de calmarles el deseo,
como niños,
mintiendo a sabiendas
la verdad de los labios.


Sofía - 12/03/07

Sunday, June 24, 2007

Mother Nature


Extraño tanto el olor al rocío húmedo
y a tierra de la mañana,
el frio helado de la madrugada
que envuelve los párpados y las sienes
y obliga casi sensualmente
a acomodar la cabeza hacia atrás
para que el viento pueda besar el cuello,
la punta de la nariz y en un escalofrío
me susurre al oído historias de otros lugares,
en otros tiempos.


Extraño tanto la sensación 
de fundirme en la tierra, 
convertirme en sus raíces, en sus brotes, 
en la locura de su savia que luego es mi sangre 
y que me abraza como nunca nadie, 
inmensamente, desde todos lados.

Extraño tanto que la adrenalina 
me consuma hasta las lágrimas 
y que me haga abrir los brazos 
y el corazón con los dientes apretados 
(tanto miedo y deseo), 
que el dualismo de mis pensamientos 
me conmueva lo más profundo de mi existencia 
que es mi amor, que es mi locura por la vida 
para después arrojarme al vacío de sus valles 
así de una vez por todas aprendo a planear, 
a llegar intacta a sus suelos... o a su cielo.

Quizás me toma por sorpresa 
que me encuentro inconmensurable en estos suelos 
porque ya no soy yo la que extraña tanto sino mi propio cuerpo 
que me pide desesperadamente que salte desde esta cima 
hacia el vacío, hacia el futuro, hacia el todo que de repente 
también soy yo y que debo confesarme, 

Me espero hace tiempo, 

desde lo más profundo para correr a encontrarme 
así no me queda el cuerpo lastimado de tanta caída y tanto amor.

Quizás, sólo quizás, me dejes llevarte despacito hacia donde voy.


Sofía.

Monday, March 12, 2007

Equilibrista

Y por qué no caminar equilibrista
en tu sombra

si desde antes,

descendí exhalando constelaciones,
palpando recuerdos,

y besando tus ojos despacito

para que no despiertes.

Por qué no saborear instintos

y caer lentamente en unos labios

estremeciento quién sabe qué tiempos...


Sólo esperar incierta
entre nebulosas

intentando saber
si ya eres un recuerdo...


Cuento



Eterna, gritó la luz al reflejarse en sus casi llantos enmohecidos por las horas.
"Más adelante la vio saltar y jugar con el futuro".
Eterna, retumbó una lágrima en el cemento frió de la lápida del profundo amor que la engendró a la vida.
Eterna, le dijo despacio y luego se apropió de sus salvajes labios
y profundidades, todas, para asentar como primera, "y no última", le
dijo, vez. Para desaparecer.
Milena, atravesó alcohólico el pecho de su húmedo y finito
compañero sexual. Luego se abrió paso entre sus poco vírgenes muslos
para violar su memoria y rebelión por siempre... Para siempre...
Libertad, exclamaron las cuerdas del cello con el cual huyó hasta nunca.
Milena, pero esta vez ella lo atravesó, oscuramente conciente de
que quería matarlo lo más posible y lo más dolorosamente, hasta
satisfacer sus entreverosas entrañas.

Eterna, la encontró despacio nuevamente y le prometió la libertad en su alma, en su mente.
Milena, le susurró, y ella se asustó, para regresar despacito hasta sus ojos y brazos fríos...
"Pero no tengas miedo", le pidió, "por favor".
"Por favor", repitió ella.
"Ahora sí", le dijo, "Eterna", selló en su instinto y en su nombre su infinito destino, y la locura se enterró en sus venas.
"Milena...", se dijo. "Ahora sé. Ahora entiendo..."

Y así se hizo.


Sofía.